Desde que las redes sociales hicieron su gran boom en todo el mundo, la preocupación de mantener nuestra información segura y privada se ha ido incrementando, creando reglas bastante complejas para el acceso a la misma. Aunque, muchas veces, está información ayuda a los sitios a brindarnos gran cantidad de información sobre cosas de nuestro interés, ya sean sugerencias de amistad, personas a seguir y/u objetos que podríamos adquirir. Brindándonos de esta manera una publicidad más certera y totalmente personalizable.
Sin embargo, nuestros hábitos dentro de las redes sociales, también dan a conocer datos que no están explicitamente escritos en nuestro perfil, por poner un ejemplo, los likes que damos en Facebook.
Un estudio publicado por la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, tomó como muestra 58,000 usuarios de FB, y se dedicó a explorar los likes que daban dentro de está red social.
Información que a primera instancia no arrojaba algo útil, pero en conjunto, puede sentar las bases para desarrollar un perfil socio-demográfico.
Es decir, cada like encaja como un rompecabezas y poco a poco va revelando detalles relativos a nuestra personalidad, pudiendo mostrar orientación sexual, nivel cultural, entre otras cosas.
(Lo interesante es que la información de las páginas que damos like, es pública, y rara vez la tenemos restringida)
Usando esta información y un software desarrollado para la investigación, el sistema fue capaz de lanzar las siguientes clasificaciones con bastante precisión:
- Distinguir fumadores, 73%
- Sexo, 93%
- Orientación sexual, 88%
- Ideologías póliticas, 85%
- Edad de los usuarios, 75%
Para las demás categorías se necesita una muestra más grande, pero aun así partiendo del caso que solo se vieron las páginas que se les dio like (y teniendo en cuenta que en promedio cada persona tiene por lo menos 60 páginas dentro de esa categoría), es bastante la información obtenida, ¿no creen?
Ahora pónganse más paranoicos de lo que ya estaban, circula más información nuestra en internet de la que posiblemente imaginábamos.
Consejo. Como siempre lo he dicho, si algo es privado, no lo publiquen. Existen miles maneras posibles para comunicar algo de esta índole, pero definitivamente, una red social no lo es.
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